Tomamos un elevador pues los pisos parecían interminables. Cuando llegamos a las puertas del cielo notamos que estaban cerradas debido a una próxima remodelación; ese lugar no diferenciaba mucho de una enorme ciudad con edificios de concreto, calles pavimentadas, parques de diversiones, marquesinas por todos lados y millones de almas que se paseaban despreocupadas y distraídas.
Dios estaba triste, sentado en un alto trono en medio de la ciudad, maquilando la próxima destrucción...
Después de todo, ¿Dónde está la más grande abominación en todo el cielo? ¿Era aquello lo que describieron como Babilonia la Grande?
Dios estaba triste, sentado en un alto trono en medio de la ciudad, maquilando la próxima destrucción...
Después de todo, ¿Dónde está la más grande abominación en todo el cielo? ¿Era aquello lo que describieron como Babilonia la Grande?
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