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Exhumacion-es.

"Exhumaciones" es un recorrido por la literatura light del nuevo siglo, un juego de palabras a veces corto a veces no tanto. Que intenta reflejar emociones, obsesiones y locuras "temporales".
"Exhumaciones" Es un viaje desde el centro de la Tierra hasta lo más recóndito de mi universo personal.

30 oct 2009

vuelta de tuerca.

Detuvo su caminar al escuchar pasos que venían trás ella, miró de soslayo y alcanzó a observar la sombra de un hombre que se tambaleaba unos metros atrás, aceleró el paso al tiempo que su miedo se incrementaba y dio vuelta en un callejón lúgubremente iluminado. Él hombre le gritó algunos improperios, los ecos de sus gritos rebotaban cruelmente en las paredes de ladrillo viejo e iban a perderse en las empedradas calles, intentó caminar más a prisa pero debido a su completo estado de ebriedad trastabillaba a cada rato y eso le provocaba una hilarante furia. -Vamos, querida. Detente un momento que podemos platicar.- decía una y otra vez.
Ella no quiso saber más y corrió tanto como sus piernas se lo permitieron hasta desaparecer trás unos contenedores de basura. Desconcertado, el hombre se paró bajo el halo de luz de una lámpara intermitente, se preguntaba donde se habría metido, tenía que estár en algún lugar puesto que no había otra salida, vociferó, gritó y se desgarró la garganta llamándola pero nadie contestó. Esperó un momento, ella no pudo contener más la respiración y al exhalar escapo de ella un suave gemido que rompió el silencio. El hombre, extasiado y rabioso se acercó con paso firme hacía un hueco que formaban los contenedores, ella permanecía petríficada con las manos sobre el rostro.
-Querida, sólo quiero hablar contigo...- repetía mecánicamente el hombre, pero ella no respondió. Ni siquiera se movía, es más nisiquiera respiraba. El hombre le tomó de los brazos, estaban fríos pero cedieron con suavidad cuando las apartó de su rostro, era un rostro inconfundible... Blanco y con grandes y oscuras cuencas en el área de los ojos, sonriente, irónica, fría y terriblemente hermosa. Tras observar esto el hombre cayó de espaldas con los ojos más abiertos que nunca, quiso arrastrarse y escapar pero su cuerpo ya no quiso hacer caso.
-¿De qué quieres hablar, cariño?- dijo la Muerte.

1 comentario:

Estefano dijo...

pensé que la muerte era el borrachito de atrás...al final todo se cambia.